Sale del agua con el pelaje oscuro tirante
ojos noche sin estrellas
cabeza en alto girando
en el aire espirales de hocico que busca
a la plena luna
vestida de nubes cimbreantes
hocico que implora a un viento
que la desnude
de una vez por todas
para por última vez
sus aullidos
en la cara estamparle...
Y mientras
arrancará su piel
para arrojar los jirones
a la blanca y traidora esfera,
que no supo guardar palabras...
Luna maldita,
ladrona de soles
traidora de confesiones,
corona falsa de noches
de ebriedad y de pasiones.