Soy la que abre puertas y ventanas.
Para que entre un rayo de sol.
Una brisa de aire.
Una ilusión.
Un sueño.
Una esperanza.
Un paisaje.
Aunque esté a oscuras y ahogándome.
Aunque viva en una cueva tenebrosa y fría,
sin ventanas ni puertas.
Aunque haya perdido las ilusiones.
Aunque ya no tenga sueños
Aunque las esperanzas me evadan
Aunque los paisajes se desvanezcan.
Soy la que camina descalza y en puntas de pie por las noches…
Para que no me escuchen.
Para que no me vean.
Para que nos se den cuenta…
Soy la que grita silencios.
Soy a que duerme despierta.
Soy a que a veces no come.
Y no se dan cuenta.
Soy la que en este momento reacciona y grita un hartazgo.
Soy la que hoy cierra de un golpe la puerta.
Soy la que traba las ventanas para que no entre más nada.
lunes, 14 de septiembre de 2009
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Eres simplemente extraordinaria,me encanta como
ResponderEliminartransmites en tu poema, todos esos pensamientos llenos de sentimientos ,la sensación de soledad, que aunque a veces estemos rodeada de gente, en tu interior te sientes un poco sola, creo que mucho la hemos sentido en mas de una ocasión
Aun así abrimos puertas y ventanas, que entre la luz y nos carge de energía.
Jamas cerrar siempre abrir.
Gracias por todas esas observaciones que me escribistes en el comentario,la verdad es que no me había parado a pensar.
Pero llevas razón creo que escribimos diferente cuando empezamos, tu maravillosa mente bien por supuesto y yo voy aprendiendo de vosotros.
Un besito guapisima.
Gracias geni!!!!el tema es que a veces nos salta la chifladura y damos algún que otro portazo...cuando vemos que abrimos la ventana y no toman ese sol ...besos linda amiga!!
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